La temporada navideña ha llegado a su fin y con ella, la hora de despedirnos de las decoraciones festivas que han llenado nuestros hogares de alegría y color. Uno de los momentos más emblemáticos de esta tradición es el belén, pero ¿cuándo es el momento adecuado para quitarlo sin perder el espíritu navideño?
El belén, con sus figuritas de María, José, el niño Jesús, los pastores y los Reyes Magos, es una pieza central en muchas casas durante la temporada navideña. Pero una vez que las fiestas han terminado, surge la pregunta de cuándo es apropiado quitar esta representación tan significativa. ¿Debemos hacerlo inmediatamente después de la festividad o podemos disfrutar de su presencia un poco más?