Deliciosas y sabrosas, las croquetas de jamón y pollo son un manjar que deleita a grandes y pequeños por igual. Su textura cremosa por dentro y crujiente por fuera las convierte en un bocado irresistible en cualquier ocasión. Aprende a preparar estas croquetas de manera sencilla y disfruta de su exquisito sabor casero.
Los ingredientes básicos necesarios para las croquetas de jamón y pollo incluyen: harina, mantequilla, leche, caldo de pollo, jamón, pechuga de pollo, cebolla, ajo, nuez moscada, sal y pimienta. Estos simples ingredientes se combinan para crear una explosión de sabores en cada bocado.
¿Cómo hacer las croquetas de jamón y pollo?
1. Preparación de la mezcla: En una sartén, derrite la mantequilla y sofríe la cebolla y el ajo picados finamente. Agrega la harina y mezcla hasta que se forme una pasta homogénea.
Cocinando la mezcla
2. Añade la leche y el caldo: Incorpora la leche y el caldo de pollo poco a poco, removiendo constantemente para evitar grumos. Cocina hasta obtener una mezcla espesa y suave.
Cocinando las croquetas
3. Integra el jamón y el pollo: Agrega el jamón y la pechuga de pollo cocida y desmenuzada a la mezcla. Condimenta con nuez moscada, sal y pimienta al gusto. Deja enfriar la mezcla antes de formar las croquetas.
Pasos para empanar y freír las croquetas
4. Forma las croquetas: Toma porciones de la mezcla y dale forma alargada o redonda según tu preferencia. Pásalas por harina, huevo batido y pan rallado.
Freír las croquetas
5. Fríe las croquetas: Calienta aceite en una sartén y fríe las croquetas hasta que estén doradas y crujientes por fuera. Escúrrelas en papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.
Disfrutando las croquetas de jamón y pollo
Ahora que has preparado estas deliciosas croquetas, sírvelas calientes como aperitivo o acompañamiento. Su interior cremoso y su exterior crujiente seguro que conquistarán a todos tus comensales. ¡Haz que cada bocado sea una experiencia inolvidable!
¿Se pueden congelar las croquetas?
Sí, puedes congelar las croquetas antes de freírlas. Colócalas en una bandeja separadas entre sí y una vez congeladas, guárdalas en una bolsa hermética en el congelador. Para consumirlas, solo necesitas freírlas directamente sin necesidad de descongelar previamente.
¿Cómo puedo darles un toque diferente a las croquetas?
Para variar el sabor de las croquetas de jamón y pollo, puedes agregar queso rallado a la mezcla o incorporar hierbas frescas como perejil o cilantro. Incluso podrías experimentar con algún toque de limón rallado para un sabor cítrico y refrescante.